El pasado 14 de octubre el Consejo General de la Ingeniería Técnica Industrial de España (COGITI) y el Consejo General de Economistas de España (CGE) presentaron el Informe ” Desarrollo Sostenible de la Pyme en España”.
El objeto principal de este trabajo es analizar el grado de desarrollo sostenible de las pymes en España y las prácticas realizadas por las mismas en este sentido. Además, este informe pretende ser de utilidad a las empresas, a los profesionales y a los distintos agentes económicos y sociales, facilitando información para la toma de decisiones a la hora de planificar estrategias de desarrollo sostenible.
Principales Conclusiones del informe Desarrollo sostenible de la pyme en España:
– Las principales barreras para la sostenibilidad empresarial de las pymes son, de mayor a menor importancia, la falta de ayudas públicas, lo costoso de implementar políticas de desarrollo sostenible, y la falta de recursos financieros y de recursos humanos para la implantación de estrategias sostenibles.
– La medida de sostenibilidad medioambiental considerada más relevante para las empresas es la reducción del consumo de energía, seguida de la reducción de las emisiones de gases efecto invernadero.
– Cerca del 60% de las contestaciones que se han recabado afirman que aún no revelan información no financiera. Por el contrario el 40% ya lo hacen (dato este último –40%– que puesto en contexto con no hace muchos años es un dato a destacar y nada despreciable, más si tenemos en cuenta que la mayoría de empresas de la muestra no alcanzan la dimensión establecida para tener que informar a este respecto de manera obligatoria).
– La actual situación sanitaria creada por la COVID-19 ha provocado una aceleración en la implementación del teletrabajo en las empresas, así éste ha tenido lugar en el 87,9% de las empresas encuestadas. Además, también se denota un alto porcentaje de compras electrónicas (79,4%), lo que junto a la utilización de páginas web (84,5%) suponen las TICs más utilizadas por las empresas.
– Según los encuestados, los principales beneficios que se derivan de las políticas empresariales sostenibles son la mejora de la imagen y reputación de la empresa, seguido del aumento en la satisfacción de los clientes que supone aplicarles políticas comerciales socialmente responsables, el aumento de las ventajas competitivas, la mejora de la motivación entre los empleados y, por último, el aumento en la rentabilidad empresarial.
– La importancia de que el equipo directivo reconozca las prácticas de gestión sostenibles es considerada la medida más relevante para una gestión sostenible de las empresas.
– Las medidas que las empresas consideran que ejercen una mayor presión hacia la sostenibilidad del negocio son la concienciación social y medioambiental de los propietarios y/o directivos de la empresa, y el efecto hacia la sostenibilidad que deriva de la legislación social y medioambiental.
– Las empresas han centrado las prácticas de Responsabilidad Social Corporativa (RSC) dirigidas a sus empleados en favorecer el desarrollo de su carrera profesional y en posibilitar una flexibilización laboral para permitir conciliar la vida laboral y familiar. En cuanto a las acciones de RSC dirigidas a los clientes, se demuestra que las empresas han tenido como máxima preocupación, en todas sus prácticas de RSC llevadas a cabo, aumentar la satisfacción de sus clientes.